La ascensión de
Zoiolagaña desde
Munárriz es poco más que un paseo matinal. Sí que tiene alguna cuesta empinada para ganar las crestas de los montes, pero el resto son paseos por cuestas inapreciables o en descenso.
Sin embargo la vista de toda la cresta cimera, el amable paisaje de las cercanías de Andía y el entorno que nos rodea en todo momento hacen de esta excursión una agradable experiencia para escaparse un poco de la vida urbana.
Rozaremos ligeramente el ambiente pastoril de la sierra de Andía y divisaremos los barrancos que rodean la
Trinidad de Iturgoien, pero sin llegar a adentrarnos en ninguno de estos ambientes.
Quizá, si queremos hacer algo más puede ser interesante combinar esta excursión con la prolongación desde el paraje de Siete Hayas, girando hacia el interior de Andía y visitando
la balsa de Erna.
Pero eso es algo que se escapa del propósito de esta ruta.
Para acercarse a Munárriz hemos de adentrarnos en el valle de Ollo y subir por la carretera NA-7020 en dirección a Ultzurrun primero, y después continuar ascendiendo. Coronado el puerto de Zabalgoien dejaremos atrás los cruces de Azanza, Aizpún-Goñi y Urdánoz para llegar al de Munárriz.