Amatriain.
Debajo de la iglesia hay una zona amplia donde podemos aparcar.
Un panel y unas marcas arrancan girando hacia el norte y subiendo por detrás del templo. Si queremos seguirlas tomaríamos el camino de Orisoain por el que volveremos. Después, en parte, se pierden, pero indican un recorrido más corto que el que vamos a describir.
Ignorándolas seguimos la calle que apunta recta hacia el nordeste (derecha) y mantenemos la dirección para salir en ligero ascenso por el camino de Olleta.
Terminamos abandonando el pueblo entre un muro (a la izquierda), y un caserón a la derecha. Nada más salir se vuelve, en los primeros metros, descendente.

Bifurcación.
Por la izquierda, ascendiendo.
Enseguida volvemos a descender y, tras varias curvas, en un tramo recto…

Por la izquierda, seguimos un camino de tierra (Camino de las Parcelas) bastante erosionado que asciende más que la pista, bordeado por carrascas.
0:13 - En una zona que pudiera resultar confusa mantenemos el borde derecho del carrascal.

Después de una alambrada que nos hace girar a la derecha, el camino, momentáneamente, adelgaza hasta convertirse en senda. Pronto vuelve a la anchura anterior.
A la derecha vemos una balsa de e reserva de agua para el ganado. La instalación forma parte del corral de Bixkor, que también tiene una nave ganadera algo más adelante.
Volvemos a ganar altura.

El camino termina por fundirse con una pista de grava.
A la izquierda.
Pronto desaparece la grava y el suelo vuelve a ser de tierra. De momento mantiene la anchura.

Collado. Portillo de Amatriain. Hemos alcanzado aquí el lomo que culminará en San Pelayo.
Cruce de caminos. Giramos a la izquierda.
Hay un cartel que indica Uzkita en la dirección a la que damos la espalda y Amatriain en el camino por el que llegamos.
Plantación de pino laricio que exhibe abundante procesionaria. Entre los árboles se mantienen robles residuales de la vegetación primigenia.
Vamos ganando algo más de altura por la loma. Más adelante la carrasca, el roble y el quejigo se adueñan del paisaje, aunque sigue salpicado de más parcelas de pinar.

Se desvía a la derecha una senda, entre pinos, con la indicación «Artariain».
Mantenemos la pista, sin tener en cuenta la desviación.
Cinco minutos después se abre el paisaje. Vemos al sur Tafalla y Pueyo, y muy cercana la cima de San Pelayo.

Marcado con señales de SL llega por la izquierda, con un cartel indicativo, el camino-sendero que sube más directo desde Amatriain.
Si quisiéramos regresar directamente, podemos utilizar esta derivación. La ascensión por aquí está publicada en Rutas Navarra.
Hemos de subir un poco más.

Cima y ermita de San Pelayo.
Espacio algo despejado, aunque los árboles crecen en las cercanías.
La ermita pertenece a Amatriain, Orisoain y Artariain. Los tres pueblos comparten la propiedad y la advocación. En los últimos años ha sido restaurada, como puede comprobarse comparando la fotografía de esta ruta y la que muestra la ruta que citamos antes, donde se puede ver cómo el edificio era bastante más largo, probablemente porque incluía refugio adjunto.
Ahora presenta espadaña y una bonita silueta.
Sigue a su lado el vértice geodésico, sobre un pilón de unos metros de altura que intenta superar la cercanía arbórea.

En el lado contrario del edificio, a unos veinte metros, encontramos el buzón montañero instalado por Trinkete Taldea en 1998.
Ahora seguiremos el trazado de la pista, iniciando brusco descenso.

Curva cerrada hacia la izquierda.
Salimos aquí por sendero que mantiene la dirección entre la vegetación.
Perdemos altura caminando por la loma entre pinos y carrascas. Es una senda que accede a la línea de palomeras que se levantan en el lugar.
1:21 - Cruzamos la pista antes abandonada. El sendero sigue en la dirección que traía hasta ahora.

Por segunda vez reencontramos la pista.
En esta ocasión sí, la seguimos en descenso a la izquierda.
Bajamos junto a una regata profunda. A la derecha vemos una zona claramente más húmeda, con abundancia de bojes. A la izquierda se eleva la ladera ocupada por pinar, con sotobosque muy limpio.

Ya a la vista de Orisoain, en terreno casi llano, se incorporan otra pista y un camino herboso perpendicular por la izquierda.
Mantenemos nuestra pista, acercándonos al pueblo.

Alcanzamos el punto más bajo del recorrido.
A la vista de Orisoain empezamos a subir, suavemente, hacia el pueblo.

Orisoain.
Atravesando la calle principal llegaremos a la iglesia de San Martín de Tours. Si la encontramos abierta puede que tengamos oportunidad de visitar la cripta, una de las más interesantes del románico rural en Navarra.
Si no hay suerte, siempre es factible descansar un rato entre sus calles. Resulta una localidad muy agradable para detenerse un rato.
Después regresaremos al punto del camino por donde hemos llegado al pueblo.

Hemos retrocedido hasta las prrimeras casas.
En el muro de una de ellas están clavadas unas señales que indican hasta cuatro lugares en la misma dirección. Como se puede apreciar en la imagen, uno de ellos es Amatriain.
Subimos por calle de piso de hormigón. Pronto dejamos atrás las edificaciones y seguimos ascendiendo.
El piso se convierte en asfalto y sigue ganando altura.

En mitad de la cuesta mantenemos la pista mientras otra, de grava, sale a la derecha en dirección a Benegorri.

Alcanzada la mayor altura el carretil desciende por el lado contrario.
En lo más alto sale por la izquierda otra pista. Es la que nos corresponde tomar.
Mantiene el trazado junto al lomo mientras deriva hacia el este.

A la derecha se marcha otro camino herboso ancho.
Mantenemos la principal.
El paisaje es abierto, con campos de labor extensos y pequeñas manchas de carrascas que separan las piezas o se ven aisladas.

Otra pista se va por la izquierda en ascenso con la indicación «Arrondoba». No la tenemos en cuenta.

Después de un ascenso más largo una pista sale a la derecha en perpendicular.
Sin tenerla en cuenta mantenemos la dirección. Pronto…

Triple bifurcación.
De los tres ramales dos de ellos son pistas como la que hasta ahora llevábamos. El tercero, el que queda entre las dos, en el centro, y que mantiene la dirección que traíamos, es un camino de hierba que se introduce entre carrascas.
Este es nuestro itinerario. Abandonamos la grava y pisamos suelo de tierra.
La anchura va a menos, a medida que perdemos altura.
Al fondo vemos, enseguida, la localidad de Amatriain.

Enlazamos con el SL señalizado que antes hemos mencionado, conforme baja de San Pelayo. Delante de nosotros traza curva cerrada.
Por la derecha, seguimos descendiendo hacia el pueblo, ya muy cercano.

Amatriain.
Final del recorrido.