El Sendero Local NA-133, señalizado por el
Consorcio Turístico del Pirineo, fue publicado inicialmente por Jesús Elosegi en la ya clásica obra del senderismo navarro «Paseos Naturalísticos» (Pamplona, CAN-1982).
En aquella publicación este itinerario era el último de la lista. Con él se cerraba una recopilación de 80 paseos. Hoy se ha recogido su recorrido intacto y en breve podrá verse también reproducido en esta web tal y como lo documenta el Consorcio.
Lo que aquí se describe es un paseo por el mismo, pero con dos añadidos:
Desde el Corral de Alzueta proponemos acercarse por una senda de unos 800 metros de longitud hasta llegar al borde mismo de las paredes de la Foz, llegando a un espectacular mirador que nos permite tener bajo nuestros pies, a vista de pájaro, todo el recorrido de la misma. Este desvío no es aconsejable para personas que sufran de vértigo o si vamos acompañados de niños pequeños. No hay protección alguna en el cortado, y la caída desde el mismo resultaría fatal. Así que ¡Ojo!
El segundo desvío es mucho más corto, pero tiene características similares: por una estrecha senda que podemos tomar junto al borde sur de la Foz, junto a la boca del túnel, nos podemos acercar hasta lo que queda del
puente del Diablo. Una breve visita a este punto merece la pena, por lo insólito del lugar y la belleza del mismo. Pero resulta tan peligroso como el anterior.
De ahí que el paseante debe ser consciente de lo que hace cuando se acerque a estos dos puntos.
El camino normal asciende desde la entrada norte de la Foz, desviándose a la izquierda por una senda que sube a las laderas que atraviesa el tajo excavado por el río Irati.
Tras un rato de ascensión caminamos paralelos al cortado, algo alejados del mismo, hasta superar el corral de Alzueta. Unos metros más allá pasamos bajo el tendido de alta tensión que cruza en perpendicular. En este punto es donde podemos tomar una senda para acercarnos al cortado.
Después en llano o suave descenso seguimos hacia el este la pista que empalma con otra más moderna que sube a las canteras. La tomamos en descenso y atajando por algunas sendas alcanzamos la pista que recorre la antigua caja del tren del Irati, que nos permitirá atravesar la Foz, sus dos túneles y, si lo deseamos, visitar el puente del Diablo antes citado.
Para llegar al punto de inicio, a la entrada de
Lumbier desde la carretera hay una rotonda que tomamos a la derecha. El itinerario hasta la Foz está señalizado. Pocos metros antes hay una barrera y un aparcamiento a la izquierda.